Por Thomas Jimmy Rosario Martínez

La legisladora Municipal Ivonne Gaetán se fue metafóricamente a orinar y tiró unos gases malolientes en mi jardín de Facebook. Su masturbación mental (metafóricamente también, en el lenguaje del escritor puertorriqueño Luis Rafael Sánchez) la ha llevado desde que en el discurso de la defensa del negocio de «desarrollo económico» de la Casona, malusando su inmunidad parlamentaria, me lanzó un ataque político con el tema de un supuesto fraude que yo había cometido. Ahora lo hace desde la temática de un desaforo de mi anterior profesión de abogado, a la que renuncié por enfermedad tres años antes de lo que dice.

Comoquiera, el contenido de la información que vierte la usó un publicista del PNP en tiempos en que como periodista yo descubría públicamente los entuertos locales y ambos defendían a los corruptos de su partido, porque le representaban como a ti, Ivonne, ingresos económicos. Lo sé porque nunca has rechazado los setenta de la dieta que te dan por hacer poco o nada.

Tanto a él como a Hector Luis Torres, exrepresentante del Partido Nuevo Progresista les ha ido muy mal en la vida. Al último lo despidieron de un cargo importante en el gobierno por alegada prepotencia como la tiene tu líder político local, Ivonne, no cuajó como candidato a alcalde de su pueblo de Morovis y en las recientes primarias ha sido rechazado al postularse como legislador nuevamente. Una vez hasta me retó para que yo acudiera a su programa de radio donde él iba a presentar la evidencia de mi desaforo, como si atacando mi carácter pudiera borra las verdades que dije del gobierno pepené del 2005 al 2012. Lo único que logró fue su propio desaforo personal, como funcionario y como político. Para ese tiempo, el uso del alcohol se convirtió en su enemigo. La carita de nene bueno de sus afiches ya no la quieren en el Partido Nuevo Progresista. Su presencia huele a azufre, según algunos lo describen. Unos que no saben lo que es Karma, dicen que eso le pasó.

Respecto a ti, sabes que nos saludábamos con mucho respeto. Mis críticas a la legislatura municipal a la que perteneces y el servil sello de goma que has ejecutado en los pasados años te hacen parte de un mediocre cuerpo de legislación que no debería existir por causa de personas como tú. Y no lo digo porque seas mujer, porque siempre he apoyado a las mujeres que han servido allí por constituir una minoría injusta. Si no, pregúntale a la expresidenta Janette Miranda.

Lo digo porque no sabes leer ni legislar. A manera de ejemplo, porque con una muestra basta, toma el proyecto de la Casona. El día que me mencionaste tácitamente porque te faltó valor para decir mi nombre (ya yo sabía que ibas a decir esas palabras porque eres parte del combo del comité de odio de los populares), negaste lo que era evidente de que en el contenido del proyecto que tu y la mayoría aprobaron había la intención de vender la propiedad. No era posible interpretarlo de alguna manera porque estaba explícito. Y no solo no leíste ese proyecto porque tampoco lo entendías sino que pretendiste defender al alcalde en su posición de que era cierto que lo decía pero era solo para tener poder de negociación sin intención de venderla. Ningún legislador del mundo hace leyes u ordenanzas con lenguaje ambiguo sujeto a la interpretación de otro poder institucional, sino que precisamente el poder legislativo es quien regula al poder ejecutivo.

Pero como el proyecto no fue originado por ustedes que sólo se dedican a radicar resoluciones de felicitación y a ensalzar figuras para ganar simpatías y votos, no lo leyeron ni le corrigieron esa y otras partes. De hecho, se dice que ni siquiera Marcos y sus asesores redactaron ese proyecto, sino que fue la misma compañía interesada quien lo hizo. Pero en tu quehacer ciego de servir a tu partido y a los que parece que son más inteligentes que tu, también trabajaste como comisionada en la mentira revocada judicialmente de la certificación electoral, del Comité de Marcos Cruz como. Fuiste tu la que sometiste el documento fraudulento e insuficiente de acuerdo a las leyes del país y te quedaste callada, por lo que participaste en ese fraude electoral.

Al visitar mi espacio en Facebook no seguiste las reglas de no insultar y te bloqueé como hago con las cuentas falsas y los que no aportan nada edificante. Tu compañero Joshuan R. Gandía me escribe y dice: «…ya que la bloqueó. Ivonne dice que está relax…ya le dijo lo que quería…buenas noches». O sea, que en una alcahuetería de niño de mandado Joshua revela que en tu interior lo único que querías era que yo supiera que tu sabes algo de mi para exponerme y neutralizarme. Demostrar poder sobre mi para intimidarme. ¿A donde se fue lo que te queda de mente? ¿En verdad eres una maestra? ¿Como admites que lo hiciste por joder? Y el otro legislador, tambien supuestamente honorable, ¿cómo es tu cómplice en esa acción?

Se los he dicho antes. La verdad se dice y a veces es inconveniente, pues a todos nos revela nuestra naturaleza.

Me dice otro compañero que te llaman Fiona. No se si es tu segundo nombre, un apodo o por insultarte. Uno me dice que te lo dicen de cariño. Otros dicen que por lo bajo relacionan tu apariencia con la del personaje de la caricatura. Yo no brego con la segunda opción. Pero creo que en el desarrollo de las historias, Fiona es un personaje hermoso. Quien es bello por dentro, es también hermoso por fuera. Por el momento creo que tienes dificultades para pensar y para actuar con honestidad, responsabilidad y humanidad por lo que tu alma no se parece a la de Fiona. Pero como todos, puedes cambiar. Identifica a los que te quieren usar y si en la debilidad que exhibe tu carácter, no puedes cambiar, retírate de la política, pues como vas, no se te aspecta un futuro felíz.

Quienes tiran excreta, se manchan y cogen el olor, quienes tiran flores, siempre están perfumados.