Por Thomas Jimmy Rosario Martínez

La experiencia con la historia vegabajeña forja ideas que no están escritas en ningún lado. Esto solo se puede detectar por las personas que consistentemente estudian el todo del contenido del pasado de nuestra ciudad. Algunos meramente repiten lo que leen y eso es bueno porque otorga continuidad y aprecio, pero es mejor entender, para que tenga sentido en nuestras vidas, analizarlo todo en sus partes y el conjunto.

El todo de la historia de Vega Baja tiene tres elementos. El primero es, obviamente, el que escribe la historia, que es el ser humano. Y ese ser humano escribe y habla de lo que sus antecesores y coétaneos han hecho y hacen. El segundo es el ambiente. Y cuando decimos ambiente es todo lo que está a su alrededor, el espacio ocupado y el libre aparente. Lo tercero es la acción. Los primeros dos elementos no actúan solo. Tiene que haber, como decían los antiguos, movimiento, como en la composición humana y en toda actividad natural conocida.

La historia vegabajeña siempre tendrá esos tres elementos. La unión de los elementos, como en la química y la física, producirá unos compuestos, que son hechos, cuyo estudio nos permitirá tener la perspectiva más aproximada a la realidad de lo acontecido con sus explicaciones posibles.