
Por Thomas Jimmy Rosario Martínez
Los vegabajeños nos sentimos influenciados por nuestro entorno. Por toda nuestra historia desde la colonización, la religión católica romana ha ejercitado una fuerza espiritual y doctrinal sobre los residentes de Vega Baja en todas las épocas.
En síntesis, los colonizadores trajeron junto a su poder de sometimiento a los aborígenes la ideología religiosa cristiana que aunque dividida hoy día en distintas sectas, sigue predominando localmente. Los residentes, hacendados, hateros y comerciantes adoptaron la continuidad creando santuarios y altares en sus hogares ante la distancia que había con los edificios de las parroquias autorizadas.
En un momento dado a fines del Siglo XVIII se construyó la primera iglesia en el espacio donde conocemos que está la Iglesia Nuestra Señora del Rosario en el centro de la parte urbana de Vega Baja que conocemos como Barrio Pueblo, en el lugar destinado para ello por las Leyes de Indias, frente a la Casa Alcaldía mediando una plaza pública. Mas adelante, después de visitas de la mas alta jerarquía de la Iglesia en Puerto Rico y de ordenarse sacerdotes por vez primera en aquel templo primitivo, se ordenó levantar los fondos para edificar la iglesia y mediante una cuota de los más pudientes, se pudo inaugurar el templo en la segunda mitad del Siglo XIX.
Ese templo sufrió el efecto de terremotos entre 1865 y 1975 y luego en 1918 lo que le causó daños a la estructura, por lo que hubo que reforzarla y a la misma vez ampliar su estilo de catedral. El modelo arquitectónico se hizo basado en una iglesia de Italia y las adiciones fueron estéticas e inteligentes para hacer una monumental edificación que ha llegado hasta nuestros días, sufriendo y renovándose cada vez que un sistema atmosférico la ataca. Hay una réplica más pequeña en la ciudad de Carolina.
En su interior, hay esculturas de antiguo y gran valor, altares y objetos que han sido venerados por su simbolismo. El altar principal, por ejemplo, fue donado por los esposos Igaravídez, fue ordenado a Italia y hay uno parecido en San Germán, del mismo autor.
La Iglesia Católica en Vega Baja se ha ido renovando con los nuevos tiempos. La ideología se dicta del otro lado del mundo por lo que es una influencia constante las disposiciones papales y de los distintos cuerpos de trabajo en esa institución.
En Vega Baja, es parte de nuestra historia y de nuestro presente y de seguro lo será de nuestro futuro. El jerarca llamado Papa y que hoy día es un hispanoamericano de Argentina, que habla y da mensajes en nuestro idioma, es un factor influyente para los vegabajeños, aun cuando no seamos católicos.
