
Por Joey Nieves
No puedo entender como un hombre que fue victima de una campaña baja, donde le acusaban de perversión de menores y de homosexual, sin pruebas, donde tuvo que lanzarse a defender su integridad ante las calumnias de la oposición, se atreva hacer lo mismo contra su contrincante y compañera de partido.
Yo pensaba que su incapacidad de administrar el municipio se debía a su carácter arrogante y su desgaste en la posición, ahora parece ser falta de integridad.
¿La pregunta es, perdió la integridad en el camino o nunca la tuvo? Si nunca la tuvo, ¿entonces donde empieza la calumnia y donde empieza la verdad?
Interesante!
