Por Thomas Jimmy Rosario Martínez

El 18 de junio de 2002 se emitió el Informe M-02-58 que comprende el periodo auditado de 1 de enero de 1999 al 30 de junio de 2001 de la administración del alcalde Luis E. Meléndez Cano.

En ese informe se encontraron los siguientes hallazgos clasificados como «principales»:

1. No se celebró subasta pública para autorizar un contrato del sistema eléctrico del Teatro América.
2. Se ordenaron compras de materiales y combustible y servicios de catering sin celebrar subastas publicas.
3. Se formalizó contratos de asesoría con un contratista pagados copn fondos federales. sin cotizaciones de un número adecuado de licitadores.
4. La Junta de Subastas celebró una subasta para adquisición de servicios de catering sin que participara ningún licitador. La Junta declaró desierta la licitación y recomendó utilizar el mercado abierto, pero sin someterse a la Legislatura Municipal para su aprobación, contrario a la ley.
5. Contratación de construcción para el baneario Puerto Nuevo y la reconstrucción del Teatro América sin obtener previamente los permisos de construcción de la Administración de Reglamentos y Permisos.
6. Se obvió la intervención y permisos de las agencias estatales de la Autoridad de Energía Eléctrica, Acueductos y Alcantarillados ni Puerto Rico Telephone Company para proyecto de construcción y mejoras. Eventualmente, después de su construcción, se obtuvo los permisos correspondientes.
7. No se exigió prestar la fianza legal correspondiente a tres contratistas.
8. En dos contratos para reconstrucción y remodelaciones hubo 26 órdenes de cambio, sin la autorización de la Junta de Subastas.

Se encontraron también los siguientes gastos, considerados extravagantes e innecesarios:

1. Deficiencia cubierta con gastos operacionales de excesos gastados en la celabración de Fiestas Patronales.
2. Compra de 1,105 cajas de bebidas alcohólicas para la celebración de distintas actividades celebradas por el Municipio.
3. Dinero utilizado para fiestas de actividades de estudiantes, maestros, celebraciones navideñas y toma de posesión del alcalde.
4. Dinero utilizado para viajes de legisladores mnicipales a los desfiles puertorrique¼os celebrados en Chicago y Nueva York

En este informe se encontró un aumento en las fallas cometidas en relación con el informe anterior M-00-22 rendido el 29 de febrero de 2000.

Para este informe posterior el Contralor determinó que el no haber obtenido los permisos correspondientes para las obras realizadas, no ofreció seguridad al Municipio de que los planos estaban diseñados de acuerdo con las leyes y los reglamentos aplicables. Tampoco permitió que las agencias designadas ejercieran su función fiscalizadora. Sobre los gastos considerados extravagantes e innecesarios la conclusión fue que se afectaron adversamente las finanzas del alcalde y limitaron sus recursos para prestar los servicios esenciales.

Desde el punto de vista político, la acusación federal contra Luis Meléndez Cano por otros motivos, aunque terminó en una absolución del jurado constituido para todos los acusados que incluian sus ayudantes y directores de oficinas, le causó una merma en la victoria electoral del año 2000 en comparación con la obtenida en el 1996.

Estos informes, una vez dados a la publicidad, además del desgaste por una administración ininterrumpida desde 1972, deben haber afectado la popularidad del alcalde, su administración y la asamblea municipal. También, aunque el alcalde nunca lo ha admitido, debe haber mermado su propia confianza personal de éxito en una próxima elección, por lo que decidió no volver a postularse ante el candidato penepeísta que había vencido en las elecciones del 2000. Regresó en las elecciones de 2008 con la intención de ganar, una vez el vencido Edgar Santana Rivera se convirtió en alcalde en las elecciones de 2004.

La derrota de 2004 del Partido Popular en Vega Baja permitió que no se forjara ningún liderato nuevo con la imponente y muy querida presencia de Luis Meléndez Cano, quien se convirtió en el punto de referencia de la oposición ante los desmanes de la nueva administración opositora. Luisito reorganizó el Partido Popular local y aunque perdió electoralmente, la ventaja el Partido Nuevo Progresista no avanzó, pese a tener los medios económicos del poder, del acceso al poder con inversionistas políticos comenzando desde su director de campaña y de las manos dentro de las arcas municipales con participantes internos.

En una ocasión Luis Meléndez Cano dijo que su administración no había sido perfecta. Los informes del Contralor son un atisbo a excesos de autoridad, pero no se le relaciona en ninguna de esas faltas señaladas en que tuviera sus manos metidas en las arcas municipales o traqueteos con personas particulares para obtener beneficios externos.

Continuaremos viendo la salud administrativa de cada una de las administraciones, pues es parte de la historia definir el sonido del autobombo y lenguaje político usual de los incumbentes, llevando la imágen más correcta de los hechos y una percepción más precisa de sus capacidades, destrezas y experiencia.