
Por Thomas Jimmy Rosario Martínez
El alcalde y aspirante a una cuarta elección, Marcos Cruz Molina, sufre de pobre asesoramiento. Lo he venido diciendo hace tiempo no solo en el aspecto oficial sino en el político. Lo que hizo la candidata Nina Valedón del Partido Popular es consecuencia de los problemas que nacieron cuando Benito Martínez (Bad Bunny) criticó al alcalde públicamente en el programa de otro vegabajeño (El Tony) e incluyó el anuncio de una actividad de un contendor (Edwin (Win) Marrero en su espacio de Internet.
Una periodista de Jugando Pelota Dura entrevistó al alcalde en un espacio de radio matinal. La llamada terminó cuando se cortó la línea despues que alegadamente el alcalde llamó irrespetuosa a la periodista.
El alcalde tenía la información de referencia sobre una alegada contribución indebida de un venezolano identificado como del régimen de Nicolás Maduro, a favor de la corporación de Bad Bunny, pero prefirió que una candidata lejana tomara la iniciativa para, como es costumbre, no aparecer como el autor de una noticia contra su compueblano y no perder su apoyo en el futuro. Eso es como tirar la piedra y esconder la mano. O como dice la plena, yo no se nada, yo llegué ahora mismo, si algo pasó yo aquí no estaba…
Hay que decir que el alcalde le dió la mano en los comienzos de la carrera de Bad Bunny contratándolo en una actividad en la Playa Puerto Nuevo. Bad Bunny le retribuyó permitiendo que en la Plaza José Francisco Náter se transmitiera simultáneamente uno de su últimos conciertos en vivo, gratis para los vegabajeños y según dicen los ayudantes de Marcos, en muchas otras instancias ha cooperado. Benito está acostumbrado a ser generoso, pero para el alcalde, nunca es suficiente. Le dolió particularmente que los tenis que Bad Bunny regaló, otros fueran quien los entregaron.
El tratar de no quemar sus naves, no lo hace triunfador en ese tema, porque la autora de la denuncia fue censurada por la dirección del Partido Popular, su Presidente, Jesús Ortíz y el candidato a Comisionado Residente a Washington, José Hernández Rivera. Eso hace que le quiten la razón también, por carambola, al alcalde de Vega Baja y su mala idea de meterse con alguien poderoso que tiene el derecho a su preferencia política particular. Pero, ¿No está en el nombre de ese partido la palabra Democrático?
Los otros elementos de su campaña como el autobombo y las primeras piedras no han tenido el apoyo del pueblo. El culpar a la otredad del Partido Nuevo Progresista en Vega Baja (la pasada administración de 2005 a 2012) es un anacronismo. Las protestas contra todas las agencias estatales de forma continua o esporádica como Departamento de Recursos Naturales y Autoridad de Acueductos. Eso es ahora, porque cuando estaba Alejandro García Padilla como gobernador, no protestaba.
El lunes, originará una marcha contra Genera, que es una compañía privada pero que de paso, el ataque es con razón o sin ella, contra el gobierno del Partido Nuevo Progresista por el asunto del problema de la energía eléctrica. Hay quien dice que la agencia, motivada por la marcha que se espera, el día de hoy Vega Baja se ha quedado sin servicio de energía eléctrica. Por lo bajo se dice que ya le avisaron a los empleados municipales que los que lo acompañen en la marcha, tendrán un día de pago compensatorio fuera de récord, donde cobrará pero no va a tener que ir a dar servicio al gobierno municipal. De cualquier manera, no es efectiva una marcha, protesta o crítica cuando el propósito es el figureo y la propaganda adversa contra agencias que no se hicieron cuando no había campaña política.
Una marcha similar la realizó el candidato a alcalde Luis Meléndez Cano como parte de su campaña en las elecciones de 2008. Demás está recordarles que perdió la elección, por primera vez en su vida política. Es posible que esto sea un empujón al deprimido y lento alcalde de Vega Baja que parece que la transmisión interna es CVT y se está quebrando. Desde la campaña el exalcalde siempre está cerca aconsejándolo y hasta motivándolo (se dice que hasta sugiriéndole trucos políticos) porque parece que el alcalde está seguro que va a ganar y no se mueve con inteligencia política ni demuestra tener energía para esta campaña.
Marcos Ruz Molina nunca había tenido unas primarias dentro de su partido, nunca lo había retado una mujer y no ha recogido velas, porque se cree que tiene suficientes. Repartió trabajos, ayudas y promesas a quienes le ayudaron y despidos y viradas de cara a quienes no lo hicieron. Los políticos creídos piensan que son tan pefectos que no siguen el libro de la política correcta.
Tiene candidatos contrarios fuertes que están a la caza de votos y fuera de la estadística, todo conocedor de la política vegabajeña sabe que ha perdido electores de los que lo favorecían y la competencia de los otros partidos es recia. La Valedón y el Cruz Molina han escuchado que van a inundar a Vega Baja próximamente y posiblemente toda la isla con una propaganda masiva. Es probable que para eso, algunos policías municipales desvíen el tránsito deliberadamente o se inventen una actividad que impida el paso del tránsito para amortiguar el efecto político adverso que puede causar al atribulado.
